En verdad sabemos que es......AMISTAD

AMISTAD

La palabra “Amistad” se define como: “afecto o cariño entre las personas” y “Amigo” es definido como: “la persona que tiene amistad”. La palabra “Amigo” la usamos con mucha ligereza, ya que la aplicamos mas bien a nuestros conocidos, ya sean compañeros de clase o de trabajo, vecinos, etc., prácticamente la usamos como sinónimo de “conocido”, así como muchos utilizan la palabra “cristiano” como sinónimo de “persona” sin embargo ¿que es en realidad un amigo?; ¿es correcto aplicar este vocablo a nuestros conocidos?.

Estoy seguro que al igual que yo, alguna vez sufriste de una decepción amistosa, donde esa persona a quien considerabas tu amigo, traicionó tu amistad, quizá hablando mal de ti, o divulgando un secreto tuyo, quizá te quito al novio(a), o bien fue tu amigo mientras le fuiste útil, en fin, hay muchísimas más causales de decepción amistosa, lo cierto es que todos estamos expuestos a sufrir una decepción de este tipo que genera en muchos casos la creación de una “barrera” que hace que en el futuro no tengamos confianza en nadie más o bien que pensemos que todos los “amigos son iguales”.

Jesucristo es muy claro en lo que se refiere al concepto de amistad pues dice: “Este es mi mandamiento que os améis unos a otros como yo os he amado. Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos,. Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando, ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor, pero os he llamado amigos porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer... esto os mando, que os améis unos a otros” (Juan 15:12-15 y 17), noten que la amistad sincera está fundamentada en el amor, de ahí que Jesús sabiamente les dice que no pueden ser su amigo si no obedecen su mandato, y el mandato al que se refiere está en el verso 12 y 17, este es “que os améis unos a otros” en el verso 12 enfatizó “como yo os he amado” y observen cuan grande amor tuvo el Señor que dio su vida por la humanidad.

La idea de esta reflexión no es para que evalúes la calidad de la amistad de tus amigos actuales sino más bien, para que evalúes tu propia calidad de amigo, a veces exigimos más de lo que damos ¿no es cierto?, y pienso que en la medida que cada uno de nosotros seamos mejores amigos, es en la misma medida que vamos a encontrar reciprocidad en los demás, no olvides que para la amistad aplica el tipo de amor filial (leer “El Amor”) por tanto no puedes ser amigo de una persona si no sientes amor por ella, debemos orar a Dios para que nos de la capacidad de ser amigos tipo Jonatán y David, y de entender y obedecer el mandato de Jesús: “amaos los unos a los otros, como yo os he amado”.

Dios te bendiga